Durante estos días veraniegos se organiza todo para salir de
vacaciones y a algunas mentes obtusas les resulta muy práctico abandonar a una
mascota, para que pase miserias, que no tiene culpa de que sus propietarios
carezcan de responsabilidad alguna. Lo sensato es que el perro, ave, gato o
cual sea la especie animal que se tenga haga el mismo trayecto que sus dueños
ya que hay soluciones para todo: Casas alquiladas que admiten animales de
compañía y si no es el caso queda buscar donde ir pero sin abandonarle; también
hay hoteles que admiten animales de compañía e incluso campings y siempre
tendremos muy presentes que nada obliga a hacerse de un perro si después se le
va a dejar por ahí tirado porque para eso no tengas perro; pero también hay
residencias caninas y felinas donde poder dejar hospedado a nuestro compañero
de fatigas con apoyo profesional y en buenas condiciones. Salir de vacaciones
al extranjero tampoco es un impedimento si se considera que tanto los trenes,
barcos cómo aviones transportan a cada momento y durante todo el año un sinfín
de perros o gatos cuyos dueños deciden sacarles un pasaporte para que pasen el
veraneo con ellos. Porque es importante recordar que desde el momento en que se
decide tener mascota en casa se está asumiendo una responsabilidad cargada de
responsabilidad y humanidad. El animal de compañía no es una cosa que se tenga
para sacarlo a hacer sus necesidades y darle de comer. Si no que forma parte de
la jerarquía familiar y deben ir de vacaciones con sus dueños. Por otra parte
está prohibido abandonar animales en mitad de la calle ya que podría provocarse
un accidente, agresión o cualquier fatalidad y el dueño sería el responsable
máximo de dicho incidente ya que tener mascota es una responsabilidad civil.
Por suerte el microchip ayuda en estas fechas a que disminuyan los casos de
abandono animal. Ya que si un animal doméstico es localizado el chip insertado
dará una lectura de quienes son sus propietarios y abandonar animales conlleva
consecuencias nefastas para quien intente tirar a la calle a un animal que no
eligió ese final para él. Están los más atrevidos y carentes de humanidad
alguna que cuando llegan las vacaciones los abandonan en las protectoras o
perreras. Por suerte en algunos países y localidades eso se ve cómo una falta
de manera que, cuando la persona que abandonó a su perro o gato decide tener
otro animal se lo impiden por haber abandonado ya a uno.
Y es que lo normal es que la familia arranque el coche y
viaje con ellos hasta el canario en el caso de que sea pájaro lo que se tiene
en casa. La inmensa mayoría de propietarios de animales cuando llegan las
vacaciones repasa muy bien todo antes de salir, sin olvidarse por supuesto del
perro o gato que se tenga y que viajará felizmente con toda la familia para pasar
otro verano divertido. Es uno más de la casa y cómo tal irá siempre con sus
dueños sea adonde sea. Da gusto ir con ellos de paseo, montarlos en el coche,
hacernos fotos esas vacaciones y jugar con ellos a la orilla de la playa. Un
perro es para toda la vida igual que sucede con los hijos: Que en ocasiones hay
que desbaratar los planes por mucho que nos gusten con tal de que vengan con
nosotros. Y si resulta imposible por alguna razón pasaremos el verano en casa
con gazpachos, granizados, refrescos y el aire acondicionado. Pero abandonar a
un perro: Jamás.